
Comercio de carbono y Mecanismo de Desarrollo Limpio MDL
A través del Mecanismo de Desarrollo Limpio MDL, los países industrializados dicen reducir sus emisiones, al financiar proyectos en cualquier lugar del mundo -normalmente en un país en desarrollo, donde sale más barato- que supuestamente reducen emisiones de gases de efecto invernadero o absorben dióxido de carbono.
1. ¿Qué es y como funciona el Mecanismo de Desarrollo Limpio MDL?
El Mecanismo de Desarrollo Limpio MDL es una política que se propuso en el marco del Protocolo de Kioto, en las Naciones Unidas, para ayudar a mitigar el cambio climático. Como el desafío era muy elevado, se desarrollaron una serie de “mecanismos flexibles” de mercado como este. Los proyectos MDL están siendo revisados actualmente para migrar al marco normativo más reciente del Acuerdo de París. Los problemas estructurales que presenta el modelo y que exponemos aquí, persisten.
A través del MDL, los países industrializados dicen reducir sus emisiones, al financiar proyectos en cualquier lugar del mundo -normalmente en un país en desarrollo, donde sale más barato- que supuestamente reducen emisiones de gases de efecto invernadero o absorben dióxido de carbono. Y luego pueden contabilizar esas reducciones a sus límites nacionales. De modo resumido, la propuesta consiste en la obtención de “crédito” o “bonos” por parte de inversores o gobiernos de países industrializados, lo que -en realidad- les permite seguir contaminando y perpetuando la economía e industria basada en combustibles fósiles. De este modo, se posterga la búsqueda de alternativas, así como la implementación de políticas efectivas de ahorro y la eficiencia energética.
El MDL permite entonces a los países industrializados y a empresas no reducir sus límites de emisiones de gases de efecto invernadero.
Se puede decir, que el mecanismo MDL es un contrasentido, pues facilita las actividades contaminantes de los agentes más contaminantes del mundo, las empresas energéticas, y al mismo tiempo les genera beneficios económicos.
2. ¿Qué tipo de proyectos optan a formar parte del MDL?
Muchos tipos de proyectos son ampliamente criticados por sus impactos ambientales y sociales, como las energías renovables. Incluyendo el uso industrial de biomasa y agrocombustibles, la energía hidroeléctrica, las plantaciones industriales de árboles (a veces catalogada como reforestación). Los impactos documentados de este tipo de proyectos incluyen por ejemplo grandes desplazamientos de población muchas veces forzosos, deforestación, conflictos por la tierra y otros.
Dentro de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) existen propuestas para ampliar el rango de proyectos elegibles para MDL para incluir cultivos genéticamente modificados, o la propuesta de añadir carbón vegetal o biochar a los suelos como proyectos de fijación de gases de efecto invernadero. Son propuestas que causan gran alarma entre ecologistas y ambientalistas.
Cuantas más propuestas se adopten dentro del esquema, mayores serán las extensiones de tierras comprometidas en este tipo de proyectos MDL y mayores las amenazas para comunidades locales y pueblos indígenas.
3. ¿Donde tienen lugar los proyectos MDL?
La mayoría de proyectos que han optado a la financiación del MDL están localizados en Asia y Latinoamérica. En África, menos industrializado, hay al menos de momento menos proyectos MDL, aunque existe una presión creciente para llevarlos a cabo, bajo la incorrecta premisa de que en ese continente existen vastas extensiones de tierras despobladas disponibles.
4. ¿Quienes manejan el negocio en torno al MDL?
Son las grandes empresas o corporaciones, muchas de ellas las energéticas -es decir las más contaminantes- las que controlan el comercio de carbono comprando los bonos e invirtiendo en el mecanismo.
5. ¿Funciona adecuadamente el MDL?
Los nuevos inversores “verdes”, generalmente actores de uno de los mercados más contaminantes, el energético, ven este tipo de propuestas como una "solución" con la que "todos ganan". Pero nada más lejos de la realidad, porque el enfoque presenta muchos de problemas. No sólo ambientales, sino también sociales. Tienen impactos negativos, siendo altamente cuestionables los beneficios que se dice traen para las comunidades o el clima.
En pocas palabras: mientras se estimula la inversión verde, se están exacerbarndo conflictos por la tierra, muchos de ellos preexistentes, la destrucción ambiental, aumentando el hambre y la pobreza de la mayoría, y enriqueciendo a unos pocos.
6. ¿Qué problemas presenta este mecanismo MDL?
No lleva a cabo una reducción real de los elementos contaminantes de la atmósfera, la naturaleza y la salud, sino que es un sistema de compensación que implica dar vía libre para seguir contaminando.
El MDL no cuestiona las verdaderas causas de la crisis climática. Lo que hace es crear incentivos para actividades contaminantes y provee instrumentos para una mayor explotación de la tierra y los recursos de los países del Sur. Los impactos negativos son financieros, sociales y ambientales.
La contabilidad de las emisiones -que se compran desde el Norte y se ahorran en el Sur global- es una "cuenta de la vieja”, que se basa en arbitrariedades, pues es muy difícil cuantificar emisiones de carbono, calcularlas, pagar por ellas, y encima poder ejercer un control sobre un comercio tan etéreo. Los beneficios para el clima son de este modo muy cuestionables y lo que se promueve es más un tipo de comercio o lavado verde (greenwashing) que la reducción real de emisiones.
Además, el MDL apunta habitualmente a plantaciones y refinerías de agrocombustibles como fuentes de energía “limpia”, cuando el ciclo completo de cultivo, producción, distribución y venta es tanto o más contaminante en términos de carbono que el de las energías fósiles.
Se espera de continentes como Africa o América del Sur que hagan más espacio a proyectos industriales para agrocombustibles o monocultivos de árboles para proyectos MDL. Esto tiene consecuencias negativas muy significativos sobre los bosques, humedales y pastizales, y afecta a pueblos campesinos, pastores, indígenas y provoca un aumento de los precios de los alimentos. La existencia de vastas áreas de tierras libres disponibles en los países del Sur para estas actividades industriales es un mito muy dañino.
Una amenaza adicional viene de la mano de propuestas de nuevas metodologías de MDL que consideran el uso de la tierra, la agricultura y prácticas relacionadas con los suelos como “sumideros de carbono”. Incluso se están considerando propuestas de incluir cultivos genéticamente modificados. Y ya que campesinos y población a lo largo y ancho del mundo se oponen fuertemente a los cultivos genéticamente modificados y a las patentes sobre las semillas, el MDL representaría así una amenaza adicional a la seguridad alimentaria y podría llegar a contribuir a la expansión de estos inadecuados métodos agrícolas.
Y otro problema es que, al proporcionar dinero fácil para las empresas involucradas, en la práctica sucede que se incentiva la corrupción, el robo de tierras y las violaciones de derechos humanos, con miras a acceder a esos fondos fáciles como “llovidos del cielo”. Y paradójicamente, el MDL no contiene cláusulas que contemplen aspectos fundamentales como la prevención de la violación de derechos humanos.
7. ¿Se mitiga entonces el cambio climático?
Más que solucionar el cambio climático, se crean nuevas formas de colonización, la destrucción de ecosistemas y privatización de bienes comunes como la tierra, la atmósfera o los océanos, aumentando la deuda social, económica y ecológica entre países.
Las corporaciones involucradas no realizan ningún cambio efectivo en su forma de producción. Siguen emitiendo gases contaminantes en la misma cantidad y calidad que antes. Empresas como BP, Ford, Monsanto, Caterpillar, General Motors, General Electric, Shell y EDF Trading se benefician al mismo tiempo económicamente de todo este sistema.
En resumen, se puede decir que el mercado de carbono es un sistema perverso que distrae de la búsqueda de soluciones reales a la crisis climática y que a quienes más beneficia es a los mayores contaminadores del mundo.
8. Y por lo menos ¿Ayudan con los países desarrollados a los países en desarrollo?
Lejos de ayudar realmente, los supuestos esfuerzos de los países desarrollados para mitigar el cambio climático a través del MDL, amenazan a los recursos tierra, bosques, semillas y agua que los países en desarrollo necesitan para asegurar la estabilidad del clima.
Los países en desarrollo deben tomar nota de los problemas inherentes al propio MDL y sacar sus propias conclusiones acerca de lo que suponen los proyectos MDL ya implementados. En realidad, deben evitar dar su acuerdo ante las Naciones Unidas para este tipo de propuestas que más que contribuir al desarrollo y a combatir el clima lo que hacen es aumentar los problemas de acaparamiento de tierras, y consecuentemente el hambre y la pobreza.
9. ¿Cuál es la alternativa para evitar el cambio climático?
Como hemos visto, el comercio de carbono es una de las falsas soluciones al cambio climático que se proponen desde el Norte. Los países industrializados tienen una gran deuda pendiente consigo mismos y con los países del Sur. Pueden empezar por ejemplo por llevar a cabo políticas eficaces de ahorro y eficiencia energética para lo que tienen un enorme margen de acción, dado su gran derroche energético.
El debate internacional confirma esta postura crítica necesaria y actual frente a la colonización, privatización y perpetuación de mecanismos engañosos.
Las nuevas reglas del Acuerdo de París no resuelven las causas de fondo ni los impactos reales del MDL, sino que actualizan el marco técnico-administrativo pero no el modelo político-económico subyacente.
Artículo 6.4
Según el mismo, para que un proyecto MDL siga teniendo validez internacional, debe:
-
Presentar solicitud formal de transición.
-
Contar con aprobación expresa del país anfitrión.
-
Adaptar sus documentos, líneas base y metodologías a los nuevos estándares internacionales.
-
Superar controles de integridad y transparencia del nuevo sistema.
Ver "Los agrocombustibles y el mito de las tierras marginales", en https://journals.openedition.org/polis/2835
-
Ver "Los agrocombustibles y el mito de las tierras marginales", en https://journals.openedition.org/polis/2835, donde se discute que la tierra marginal para algunos es vital para comunidades, que como siempre verán restringidas tierras y fuentes de vida, que pasarán a manos de los grandes empresarios.

Las selvas tropicales están estrechamente relacionadas con el sistema climático: su destrucción calienta el clima. Proteger las selvas es crucial

El carbón, el petróleo y el gas natural mueven las economías del mundo y casi todas las actividades humanas modernas generan dióxido de carbono y cambio climático.

La deforestación y el cambio climático se encuentran en la raíz de los incendios forestales, que son un problema cada vez más frecuente y poco investigado.

En noviembre de 2025, la trigésima edición de esta cumbre, la COP30, se celebrará en Belém, Brasil, en el corazón de la Amazonía. Algunas claves.